jueves, 26 de junio de 2014

Aquello...

He llegado a ese momento. En mi imaginacion lo veo todo. Estoy con los perdedores, viviendo cada escena como en un filme. Pero hay algo mas para mi. Veo, mientras ellos luchan con una fuerza de la naturaleza, que mi verdadero enemigo se materializa ante mi y me muestra su verdadera forma. Nunca mentí. Mi nemesis esta frente de mi. Aún con el rostro ennegrecido puedo ver sus ojos encendidos de ira, mientras una gran sonrisa se asoma en sus labios. Que Dios me ayude...

viernes, 20 de junio de 2014

Gótico


Tiembla ante mi poder, espíritu de maleficencia,
Mientras los tambores de guerra dan la orden
Y las satánicas majestades desaten su ciencia
En este desbaratado mundo joven.

Mira la marcha dar en mi displicencia
Mientras mis hordas avanzan a su destino:
Múltiples arpías de infinito conocimiento,
¡Den la estocada sangrienta a mi clarividencia!

Me siento en mi trono de la vergüenza
A mirar los prisioneros mientras son engullidos
Por el sangriento verdugo que de la llama debuta
En el acto de los doce desconocidos.

Raquítica luz, hazte nada frente a la concupiscencia
De aquellos que dicen protegerte bajo los aguerridos
Caminos de la triada; de los que cargan la cruz
En sus sangrientas y violentas virulencias.

Gigante bebedor de sangre, padre de la sin rostro,
Muéstrame el llano flamígero del monte mejido
Que yo haré pagar a los pecadores, sueño y delirio
De los paganos que con su vida encienden la llama…

lunes, 16 de junio de 2014

La finalidad es la única cosa en el mundo que lo hará arder...


Hubo una vez un pequeño con una hermosa sonrisa y una gran fe en las personas. Conforme fue creciendo, sin embargo, el mundo le mostró lo peor que podía hacer. Y son ilusos los que piensen que fue leve lo que sufrió en carne propia: nadie tiene la más mínima idea de lo que vivió el pequeño.
En algún punto de esa niñez fastidiada, su mente se quebró finalmente en dos partes: conservó en la primera aquella sonrisa que cautivo hasta a una Miss Universo. Esa buena educación que la gente insiste en llamar amabilidad, junto con la parte buena de su corazón. Sin embargo, una pequeña semilla, la otra parte, su lado oscuro, perdió toda fe y se dedicaría a abrazar la oscuridad. Esa oscuridad que en un momento de su vida conoció. Esa oscuridad que no le mintió, que le mostró como eran realmente las cosas en el mundo. La que le dijo que le protegería y que no ha fallado.
El pequeño creció como todos los seres humanos y finalmente experimento muchas facetas del espectro de la condición humana, negándose a experimentar algunas por considerarlas innecesarias o porque esa parte buena se lo ha impedido. Pero el Amor, eso que ha vivido desde muy pequeño -por ser precoz en ese ámbito, como deseen llamarle- nunca lo ha entendido como lo demás lo entienden. Es su punto débil, como a muchos pasa. Pero es también, según piensa, la única faceta que pudiera darle el último empujoncito que necesita para caer dentro del abismo insondable que busca penetrar por completo, sin éxito hasta el momento.
No es fácil. Pero ¿Que en esta vida lo es? piensa el ahora ya adulto. La soledad, al contrario de la mayoría de la gente, no le afecta. No le molesta. La recibe gustoso. Porque es cierto. Ya abrazo alguna vez la luz. Y eso solo le provoco un dolor innecesario. Pero hasta en la oscuridad hay un tipo de luz. Esa es la que lo llama. La que le promete en cada abrazo la felicidad eterna, con solo cerrar los ojos. La que lo seduce con visiones de un mundo donde la maldad por fin se muestra tal cuál, donde incluso él podría mostrarse en un breve instante tal cuál. La única que lo puede hacer llorar como a un niño. Donde podría volver a quemar el suelo que pisara. Esa es la visión que día a día le empuja a salir adelante. El amor siempre lo ha hecho retroceder un paso. El odio lo ha hecho avanzar, pesele a quien le pese esa verdad. Y ahora ese hombre desea adherirse a ese credo con toda su alma. Sólo necesita volver a unir aquellos fragmentos perdidos de una vida que en algún momento le pertenecieron. En cuanto todo este unido comenzara el lento proceso que lo llevara, algún día, a su liberación total...

viernes, 13 de junio de 2014

Romina (Second way)

Cruel ghost that haunts until sleep depth
evokes you, lying to you, because you pamper round,
in the solitude of contention with the threshold you look,
loneliness that deifies you ...

Rising need to see you without further delay that inhibit
the heart rate and melody; I know fervor, fine frame
of good moments that return to my aching love
and allow the grace of the hollow feeling in your force.

Distends the vulgarity of my words in my defeat
to splurge your sensual naivete exempts it touches,
because the gentle breeze of your look, in my soul, subverts
and enjoys the suffering of this young agency that casts splendor.

In the vastness of the void in my soul that you are looking at the instants
that, lost in the crowd, in the rain, with stepped kiss
the past that you look to the future that ignores you, vague fantasy
the labors of the ruins that have death instead of heart ...

miércoles, 11 de junio de 2014

Romina segunda (poesía libre)


Cruel fantasma que persigue hasta la profundidad del sueño
que te evoca, que te miente, que te ronda por cuanto te mime,
en la soledad de la discordia del umbral con que te mire,
aquella soledad del que te endiosa…

Naciente necesidad del verte sin mas demora que el inhibir
la frecuencia del corazón y su melodía; sé fervor, fina montura
de los instantes que devuelven a bien mi doliente amor
y permitan, la gracia del que siente en la oquedad de tu vigor.

Distiende la vulgaridad de mis palabras en mi derrota
para derrochar tu sensual candidez, exime lo que toca,
por cuanto la brisa suave de tu mirada, en mi alma, la trastoca
y goza del sufrir de este joven albedrío que arroja esplendor.

En la vastedad del vacío de mi alma que te busca en los instantes
en que, perdida entre la multitud, bajo la lluvia, con un beso distanciabas
el pasado que te mira con el futuro que te ignora, fantasía vaga
de los desvelos de las ruinas que tienen muerte en lugar de corazón...

Dialogo desnudo (sin métrica)


¿Cómo me pides que no te quiera,
si ya de amor loco, reboso por ti?
instante hechizo de sombrías pautas
que del mundo hizo su vivir

¿Cómo me pides tiempo, cuando ya
de la embriaguez del buen adeudo
provoco mi feo sentir?

camino por las trasnochadas
lunas del discernimiento, mientras tu huella
deja clara la situación abyecta
de cuanto nos mina el momento…

Cuando desees vuelve, fina daga
que por devenir envuelves mi odio
y por cualidad devuelves en la cima
la tortura de mi edad...

Romina.


Cálida sonrisa, flor de esencia
que en mi pasado busca subsistir,
que por instancia de mi amor propicia
el encuentro de mi naciente vivir.

Tu fantasma me sigue, cruel presencia
que no deja despedirme de tu ir
y tu venir insistente me ansía,
en mi cruel y loca sed de insistir.

¿Quien me sigue en mi vil elocuencia
y me derrite y provoca asir
la eterna falta de tu dolencia?

Así me dueles. Así me veo sufrir.
Me sigue el fantasma. Tu ausencia.
La penumbra. Lo que voy a admitir…

domingo, 1 de junio de 2014

El atrapasueños

Cuando voltee a ver mi atrapasueños menuda sorpresa me llevé... la criatura que estaba atrapada en la pequeña red me hizo pegar un grito, mientras me caía y tremendo golpe en la cabeza me daba. Y si el dolor fue mucho, pudo más la curiosidad de voltear hacia el objeto de mi asombro y cerciorarme de que, efectivamente, no estaba soñando: delante de mi, en el atrapasueños que colgaba en la cabecera de mi cama hacia unas semanas, como un remedio más de tantos que busque para poder conciliar el sueño, se encontraba un pequeño ser de aspecto grisáceo, con una cara ovalada, ojos completamente negros, sin ningún tipo de ropaje, delgado pero con su forma perfectamente delineada, tratando desesperadamente zafarse de aquella prisión involuntaria.
Retrocedí todavía un poco. A leguas se notaba que yo era su objetivo porque no dejaba de observarme y tratar de escapar de forma en que, si lo conseguía, su primer movimiento lo lanzara directo hacia mi. No hacia ningún ruido, pero cada vez que lo miraba directamente, un mareo comenzaba a cubrirme y aumentaba su poder debilitante conforme avanzara el tiempo de observación, por lo que, después de un rato, lo veía solo de reojo, sin perderle la pista. y yo, en un rincón de la habitación, me movía lo mínimo para no alterarlo aún más pero en cualquier momento tendría que hacerlo. Ya el frío de la madrugada comenzaba a calarme un poco y pues buscaba ayuda, tratando de aprovechar el que no pudiera escapar de su prisión o lo confrontaba...
Después de un rato, creo que más por el frío y por el desgano aunados al hecho de que la criatura dejo de moverse aunque seguía observándome, comencé a ponerme de pie, lento. cuando estuve ya erguido, camine lentamente hacia el closet. Aquel ser aterrador comenzó de nuevo a intentar zafarse, sin éxito y eso me convenció definitivamente de que el pequeño atrapasueños, regalo de Nora, para que pudiera conciliar el sueño, era la razón de que esa criatura no pudiera ir hacia mi con no sé que intenciones: en realidad eso que estaba allí, de alguna forma, provenía de mis sueños, el objeto sólo lo atrapo y lo trajo directamente a mi dimensión. Me estaba protegiendo y tal vez, sólo tal vez, semejante horror era el causante de mis desvelos continuos.
Cuando llegue al mueble donde guardaba ropa y pertenencias varias, busque a tientas, siempre sin voltearme, siempre observando a ese prisionero en la cabecera de mi cama. Saque de la oscuridad un bate de béisbol de niño. Había olvidado jugarlo desde esa edad y lo guardaba como un recuerdo y ahora podría servirme de defensa, aún con su tamaño, pues era de madera sólida. Un buen golpe podría ser la diferencia entre vivir y morir si esa cosa lograba escapar e intentar atacarme.
Ya con un arma en mano y más seguro por ello me encamine hacia la criatura, con el fin de tocarla con el bate o de atacarla si se ponía demasiado agresiva. en cuanto estuve al pie de la cama y sin subirme a ella para tener mejor movilidad, acerque el bate a donde se encontraba aquello tan siniestro. En ese instante se aquieto y sólo me miro a los ojos. Y lo vi. Supe de donde provenía y retrocedí, pues con solo mirarme me había sentido transportado de nuevo a mis sueños más viejos: antiquísimas realidades de mi subconsciente que desataron un maremágnum de terror. Mis sueños más primitivos. Y vi la verdad tras esa criatura. Yo la había creado. como una defensa contra todo aquello que pudiera dañarme en mis sueños. Y ahora, en estos días tan aciagos, con tantos problemas, tantas angustias personales, ese ser decidió que yo era el enemigo, aquello que me dañaba más. Y comencé a llorar, porque hasta en mis sueños aquello que debía protegerme se volcaba en mi contra, mientras dejaba caer el bate, levantaba los brazos y daba permiso al atrapasueños a que liberara a mi verdugo. Después de todo, a estas alturas nadie me extrañaría ya. Y con ese último pensamiento cerré mis ojos mientras veía como aquel pequeño monstruo se dirigía, inmisericorde, hacia mi cuello...